En esta semana de luchas y reivindicaciones feministas, queríamos aportar también nuestro granito de arena, desde el mundo de los videojuegos. Y dentro de los juegos de lucha, seguramente no ha habido nunca una figura femenina más importante que la china Chun-Li.
La luchadora de la saga Street Fighter, siempre estuvo rodeada de hombres desde el principio y aun así, consiguió no solo ganarse un puesto importante, si no, ser referente y pionera para todas las jugadoras y jugadores de la época.
Capcom consiguió sentar las bases de los videojuegos de lucha, con aquel gran «Street Fighter 2» y ahí, la joven Chun-Li se erigió icono indiscutible del juego y posteriormente de toda la saga. Después vendrían otras, como Cammy, Sakura, Elena, Makoto, Ibuki, etc. Pero siempre vivieron bajo el paraguas de la china.
Hoy en día, el machismo y el patriarcado en el mundo de los videojuegos parece estar erradicándose poco a poco. Hay muchas más heroínas, más protagonistas femeninas o de otros géneros, incluso, muchas más jugadoras, programadoras, ingenieras, directoras o productoras. Y aunque este, siempre fue un mundo muy masculinizado y por momentos, estereotipado y sexista, poco a poco ha ido evolucionando (por suerte) como nuestra sociedad.
Y aunque queda trabajo que hacer, luchadoras como Chun-Li, seguro que ayudan a entender mejor de dónde venimos y hacia dónde vamos en este enorme, bonito y multicultural mundo de los videojuegos. Seguramente no fue casualidad que naciera a principios de marzo. Y lo que sí está claro es que, pase lo que pase, esta joven, inteligente, trabajadora y valiente luchadora, puede sentirse orgullosa de la «puerta virtual» que destrozó a principios de la 90’s para todos y sobre todo, para todas. Gracias, Chun-Li.